Se estima que pasamos alrededor de un tercio de nuestra vida en el trabajo.

Si queremos promover nuestro bienestar físico, mental y emocional, necesitamos crear ambientes de trabajo sanos.

Mañana se celebra el Día Mundial de la Salud en el Trabajo y el lunes el Día del/la Trabajador(a). ¡Qué mejor oportunidad para traerte algunas ideas sobre cómo podemos promover culturas organizacionales más saludables para todos!

Un ambiente de trabajo ¿sano?

Un ambiente de trabajo saludable es aquel en el que se promueve el bienestar y la calidad de vida de los trabajadores.

El bienestar organizacional es un concepto amplio que incluye múltiples elementos, como por ejemplo:

1. Cultura organizacional: los valores, creencias y normas (habladas y no habladas) que guían el comportamiento y las decisiones de la organización. Una cultura organizacional saludable promueve colaboración, respeto, y honestidad.
2. Ambiente de trabajo: El ambiente físico de trabajo, incluyendo la iluminación, la ventilación, la temperatura, el ruido y la ergonomía.
3. Comunicación: La comunicación clara y efectiva permite una comprensión clara de las expectativas y las responsabilidades, y reduce la incertidumbre y el estrés.
4. Liderazgo: Un liderazgo saludable y efectivo motiva y guía a los equipos, promoviendo su bienestar y su sentido de pertenencia.
5. Políticas y prácticas de recursos humanos, incluyendo la selección, la capacitación, la evaluación y la relación con los trabajadores.
6. Equilibrio trabajo-vida personal: La capacidad de los trabajadores para equilibrar sus responsabilidades laborales y personales
7. Beneficios y compensaciones: La compensación y los beneficios adecuados, incluyendo el seguro médico y el tiempo libre

Se trata de una combinación de factores que influyen en la calidad de vida de los trabajadores en una organización, y que pueden contribuir a mejorar su bienestar, así como su productividad, innovación y permanencia en la organización.

Cultivar organizaciones sanas

Está claro que todos queremos trabajar en organizaciones con culturas y ambientes saludables. Pero en el acelerado mundo en el que vivimos y trabajamos, puede ser un desafío ponernos a pensar en cómo cultivar el bienestar.

No hay que reinventar la rueda. Existen cientos estudios que han detectado cómo hacerlo. Aquí te comparto algunas ideas sencillas:

1. Fomentar la comunicación abierta

Crear una cultura de confianza y comunicación. Anima a tu equipo a compartir sus pensamientos, ideas y preocupaciones, asegurando que no habrá repercusiones negativas. Crea canales abiertos de comunicación, como buzones de sugerencias o formularios de comentarios anónimos, para fomentar comentarios honestos.

2. Promover una cultura de descanso

Siempre va a haber algo más que hacer, algo súper urgente y algún motivo por el cual debamos de seguir trabajando. Pero las organizaciones sanas no juegan con el descanso de su gente. Crear un ambiente donde hay un horario de trabajo establecido que se respeta, donde los fines de semana son libres (o si se trabaja, se repone otro día), y donde las personas se van de vacaciones es fundamental.

3. Priorizar el equilibrio vida laboral – personal

Las organizaciones sin fines de lucro y de impacto social a menudo operan con presupuestos y plazos ajustados, lo que hace que sea fácil pasar por alto la importancia del equilibrio entre la vida laboral y personal. Además de animar al equipo a que se tomen descansos y vacaciones, ofrecer opciones de trabajo como horarios flexibles o días de trabajo desde casa.

4. Fomentar una cultura de aprendizaje

Promover la curiosidad de adquirir nuevas habilidades y de seguir aprendiendo al ofrecer espacios de capacitación y desarrollo, programas de tutoría/mentoría o acceso a recursos en línea (como la comunidad coimpacta). Además de aumentar la satisfacción laboral, ayuda a sentirse más comprometidos con la organización.

5. Cultivar un sentido de comunidad

Crear oportunidades para que los empleados socialicen fuera del trabajo permite que se creen mayores vínculos en los equipos. Cuando las personas se sienten conectadas entre sí, no sólo se sienten más felices, sino que es más probable que colaboren más y aumente el sentido de pertenencia.

6. Celebrar los éxitos

Esto es especialmente importante en nuestro sector, donde tenemos objetivos de muy largo plazo. Tomarse el tiempo para celebrar hitos, logros y éxitos, grandes o pequeños ayuda a aumentar la satisfacción laboral y reducir el estrés.

7. Apoyo emocional

Particularmente en nuestro sector, donde los profesionales trabajan en entornos de injusticia y trauma y son, en muchos casos, altamente empáticos, ofrecer apoyo emocional a los empleados es una forma efectiva de promover la salud mental y el bienestar en el lugar de trabajo. Esto podría incluir programas de asesoramiento, sesiones de coaching personal y grupos de apoyo.

8. Predicar con el ejemplo

Cultivar una cultura organizacional saludable comienza desde arriba. Los líderes deben de ser los primeros que adopten comportamientos saludables, como tomar descansos, estar abiertos a la retroalimentación y priorizar el equilibrio entre el trabajo y la vida. Si sólo lo dicen pero no lo hacen, la cultura no cambiará.

Ejemplos del sector

Y si crees que “esto en nuestro sector no se puede hacer”, aquí te cuento algunos ejemplos concretos:

Programas de meditación y mindfulness: La organización de impacto social Kiva implementó un programa de meditación de 10 minutos diarios para sus empleados. La organización proporcionó un espacio tranquilo y cómodo para meditar, así como una guía para ayudar a los empleados a desarrollar su práctica de meditación. Después de un año, la organización informó que los empleados que participaron en el programa experimentaron una reducción significativa en el estrés y la ansiedad, y una mejora en la concentración y la productividad.

Flexibilidad en el horario de trabajo: Acumen ofrece a sus empleados la opción de trabajar desde casa dos días a la semana. Además, la organización permite a los empleados ajustar su horario de trabajo en función de sus necesidades personales, siempre y cuando se cumplan las horas de trabajo acordadas. La organización informa que esta flexibilidad ha ayudado a los empleados a equilibrar su vida laboral y personal, reducir el estrés y mejorar la calidad de vida.

Actividades grupales: Teach for America (el equivalente en Estados Unidos de “Enseña por…”) organiza regularmente actividades grupales para sus empleados, incluyendo clases de yoga, caminatas en grupo y actividades deportivas. Estas actividades ayudan a construir relaciones fuertes entre los miembros del equipo y fomentan un ambiente de trabajo positivo. Según comentan, estas actividades han ayudado a reducir el estrés y mejorar la salud mental de sus empleados.

Una cultura de aprendizaje: Ashoka ofrece a sus empleados una amplia variedad de oportunidades de formación y desarrollo profesional, incluyendo cursos de formación, talleres de habilidades y oportunidades de mentoría. La organización informa que esta inversión en el desarrollo profesional de sus empleados ha llevado a una mayor satisfacción laboral y a una reducción de la rotación de empleados.

Apoyo emocional: Save the Children ofrece a sus empleados una amplia gama de servicios de apoyo emocional, incluyendo programas de asesoramiento, sesiones de coaching personal y grupos de apoyo. La organización informa que estos servicios han ayudado a los empleados a manejar el estrés y la ansiedad relacionados con su trabajo, y han mejorado su bienestar mental y emocional.

Tal vez te interesa leer: 5 ideas sencillas (y gratuitas) para promover el bienestar en nuestras organizaciones de impacto

ACCIÓN

Escoge UNA cosa que quieras probar a hacer con tu equipo. Puede ser algo tan sencillo como proponer ir a dar un paseo juntos, o algo un poco más personal como abrir la conversación con los diferentes miembros del equipo para entender cuáles podrían ser algunas ideas o necesidades (explicando desde el principio que es una lluvia de ideas, ¡no quiere decir que se vayan a hacer todas!).

Si no eres el/la líder de ese equipo, propón y, de ser recibido positivamente, encárgate tú de llevarlo a cabo. No esperes a que lo haga otra persona.

Escríbeme y cuéntame qué te has propuesto hacer y/o, una vez que lo haga, ¡qué tal te ha ido!

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Compartiendo bienestar

Contemplar. Dedícale unos segundos a ver este cuadro:

• ¿Qué te hace sentir? ¿Qué emociones? ¿Dónde lo sientes en el cuerpo?
• ¿En qué te hace pensar? ¿A qué te recuerda o qué idea que ha sugerido?

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Referencias de interés

1. “El sueño en la sociedad de las prisas”, de Jana Fernández.
2. “Cuidar la salud mental importa más que recibir un buen salario”.
3. ¿Qué es el bienestar laboral y por qué es tan importante?
4. El bienestar laboral hace que la productividad crezca un 12%

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